- Una estrategia que recomendamos es el llamado bootstrapping
- Financiación empresarial con recursos disponibles
- Alternativa a la financiación externa
El mundo del emprendimiento está en constante evolución y una de las decisiones cruciales que los empresarios autónomos y startups deben tomar en la fase de planificación, es cómo financiar su negocio. ¿Deben buscar inversores, obtener préstamos o confiar en sus propios recursos? Una estrategia que recomendamos es el llamado bootstrapping, a continuación, te explicamos el por qué.
¿Qué es el bootstrapping?
Este término hace referencia a la estrategia de financiación empresarial que se basa en comenzar un negocio utilizando los recursos disponibles en lugar de buscar financiación externa a través de inversores o préstamos. Esto implica, por ejemplo, utilizar los ahorros personales de los fundadores, los ingresos generados por los primeros clientes y, en algunos casos, adaptarse a los espacios y recursos disponibles, como puede ser optar por trabajar en un coworking o en tu propia casa en lugar de invertir en oficinas lujosas o maquinaria costosa.
Franc Carreras, experto en marketing digital en Esade, define el término como “la manera en la que se han hecho todos los negocios toda la vida”. Y explica cómo esta nueva etiqueta ha cobrado relevancia en respuesta a la tendencia de las empresas de nueva creación y rápido crecimiento que tradicionalmente han ido a buscar financiación temprana e inversión, desde los inicios de su desarrollo.
Casos de éxito
El bootstrapping es un método viable para el éxito empresarial. Ejemplos de ellos son empresas tan conocidas como Mailchimp y Milanuncios.
En el caso de Mailchimp, la empresa de gestión de correos electrónicos que controla el 66,56% de la cuota de mercado del email marketing según Datanyze, comenzó su viaje sin financiación externa. Veinte años después de su fundación en 2011, Mailchimp fue adquirida por 12.000 millones de dólares, manteniendo su independencia financiera.
Por otro lado, Milanuncios, sitio web de anuncios clasificados en España, se vendió por 100 millones en 2014 sin haber recurrido a financiación externa.
¿Cuándo considerar el bootstrapping?
Este enfoque permite a las personas emprendedoras comenzar sin la necesidad de una inversión inicial significativa, aunque la existencia de casos de éxito no garantiza que el modelo sea la opción ideal en todos los casos. Es una alternativa que merece tenerse en cuenta cuando no se requiere un coste inicial considerable.
Los proyectos de software, cuya inversión principalmente reside en el tiempo y esfuerzo personal en el negocio, son un buen ejemplo para comenzar de esta manera.
Además, si tu objetivo es construir una organización sostenible a largo plazo, este modelo se convierte en una opción sólida al permitirte mantener el control y experimentar un crecimiento más gradual.
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