Todo lo que debes saber sobre la incapacidad temporal de los autónomos

• La incapacidad temporal es una situación que surge a raíz de una enfermedad común, una enfermedad profesional o un accidente
• Obligación de cotizar por incapacidad temporal

La incapacidad temporal es una situación que surge a raíz de una enfermedad común, una enfermedad profesional o un accidente, independientemente de si está relacionado con el trabajo o no. Esta situación impide que el trabajador pueda ejercer su actividad laboral y, en consecuencia, requiere asistencia médica, lo que de forma común se conoce como «baja de los autónomos».

A continuación, se van a examinar varios aspectos relacionados con la baja laboral de los trabajadores autónomos, incluyendo la obligación de cotizar por incapacidad temporal, los supuestos y requisitos para cotizar, así como la cuantía de la prestación por incapacidad temporal.

Obligación de cotizar por incapacidad temporal

La obligación de cotizar por incapacidad temporal es un requisito fundamental para los trabajadores autónomos, con la excepción de los Trabajadores Autónomos Económicamente Dependientes (TRADE).

Este tipo de obligación entra en vigor al darse de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Sin embargo, es importante destacar que la cotización por contingencias comunes es opcional para los autónomos en situación de pluriactividad, es decir, aquellos que cotizan simultáneamente en otro régimen de la Seguridad Social, así como para los trabajadores incluidos en el Sistema Especial de Trabajadores por Cuenta Propia Agrarios.

La cotización por contingencias profesionales relacionadas con accidentes de trabajo y enfermedades profesionales se volvió obligatoria a partir del 1 de enero de 2019 como resultado de un acuerdo entre el Gobierno, las asociaciones de autónomos y los sindicatos. Esto significa que todos los autónomos deben cotizar por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales como parte de su contribución al sistema de Seguridad Social.

Supuestos y requisitos para obtener subsidio por incapacidad temporal

La incapacidad temporal da derecho a un subsidio que ayuda a compensar la pérdida de ingresos del trabajador mientras este recibe atención médica de la Seguridad Social y no puede trabajar.

La duración máxima de este subsidio es de 12 meses, con la posibilidad de prórroga por otros 6 meses.

Para acceder a la prestación, es necesario cumplir ciertos requisitos específicos en función del origen de la incapacidad:

• Un accidente de trabajo es aquel que ocurre directamente en el curso de la actividad laboral del autónomo. Esto incluye incidentes en el trayecto hacia el lugar de trabajo, accidentes causados por fuerza mayor ajena al trabajo y aquellos debidos a imprudencia temeraria del propio trabajador.
• Una enfermedad profesional es aquella que se adquiere como resultado directo de la actividad realizada por el autónomo.
• Una enfermedad común. Para considerarse enfermedad común, será necesario estar en situación de alta o asimilada y haber cotizado un mínimo de 180 días en los últimos 5 años. Además, será necesario estar al corriente de las cuotas. Estos últimos requisitos no son necesarios en los casos de accidente de trabajo y enfermedad profesional.

Cuantía de la prestación por incapacidad temporal

A continuación, se muestran los diversos escenarios en referencia a las cuantías de prestación que se obtienen según los porcentajes de la base reguladora:

• En caso de enfermedad común o accidente no laboral se aplicará el 60 % desde el día 4 al 20 de la baja.
• Para una enfermedad común o un accidente no laboral se aplicará se aplicará el 75 % a partir del día 21 de la baja.
• En caso de accidente de trabajo o enfermedad profesional se aplicará el 75 % desde el día siguiente al de la baja.

En conclusión, la incapacidad temporal es una situación que afecta a los trabajadores autónomos debido a enfermedades comunes, enfermedades profesionales o accidentes. Y esta condición conlleva la necesidad de recibir atención médica y una posible pérdida de ingresos. Estos aspectos son fundamentales para comprender la protección social de los trabajadores con actividad por cuenta propia.