El pasado martes 27 de mayo tuvo lugar a las 12:00 un Top Entrepreneurs en el Vivero de Empresas de Moratalaz. Los Top Entrepreneurs son encuentros mensuales con un emprendedor de éxito relevante, que comparte con los asistentes su experiencia emprendedora. En esta ocasión el invitado ha sido Luis Cacho, cofundador de Arsys (http://www.arsys.es),empresa líder en el negocio de servicios de presencia en Internet (dominios, hosting, cloud) que cuenta con una cartera de más de 275.000 clientes, una plantilla de más de 300 trabajadores y una facturación anual de 43 millones de euros. Luis también preside la Fundación Promete (http://www.promete.org), un proyecto de innovación educativa orientado al desarrollo del talento.
La empresa y las personas
«Ya os lo habrán dicho, pero para mí lo más importante de una empresa son las personas»; con estas palabras inició el encuentro Luis Cacho, pasando a manifestar la necesidad de crear organizaciones humanistas que consideren a aquellos que las forman personas en desarrollo. «El éxito o el fracaso son relativos a los proyectos, no a las personas. Una persona no se acaba en un fracaso o un éxito», quiso remarcar el co-fundador de Arsys, quien además explicó a los asistentes que la clave del éxito de su compañía fue la gente que la formaba, y el clima corporativo que lograron crear.
Éxito y conducta
Por otra parte, Luis aclaró que un éxito pasado no es garantía de un éxito futuro y contó que empezaron «con una oficina de 70 metros, que pronto tuvimos que cambiar por otra… de 35». Según el ponente, el emprendimiento empresarial no depende sólo de los conocimientos; «nosotros no teníamos ninguno», dijo. Con respecto a la consecución del éxito, Luis compartió con los presentes su opinión de que es la conducta la que lo determina: «Lo inteligente es colaborar; lo inteligente es ser bueno».
Valores humanistas
Otra de las ideas que transmitió Luis Cacho fue que la ética es la conducta más adecuada a medio y largo plazo, y afirmó que «si incorporamos valores a nuestra empresa, habremos conseguido una organización humanista, con trabajadores comprometidos». De la Fundación Promete, Cacho destacó el entusiasmo y la energía tanto de alumnos como de profesores. Y, para finalizar, dejó escrita una reflexión en una ventana del Vivero: «Hacia la organización humanista y el desarrollo del talento».